Para mí el vértigo es una sensación de vacío en el estomago que se acentúa con un ligero escalofrío, acompañada de una cierta angustia sobre si nos caeremos y la incertidumbre de cómo sería el golpetazo.
Supongamos que ignoramos el hecho de que en la misma semana del noesunrescate se dispara la prima de riesgo hasta su récord en 554 puntos y el tipo de interés que paga España por su deuda roza el 7%, (6,998%). Tampoco tengamos en cuenta que siete días después ni siquiera conocemos las condiciones de rescate, pero ya el FMI nos avisa que es urgente subir el IVA y recortar los salarios públicos.
Pasemos por alto que ambas medidas sólo servirán para reducir aún más el consumo y por tanto se contraerá la economía española más de lo previsto. Incluso riámonos de que las agencias de riesgo nos han bajado tres niveles de golpe y nos ponen al borde del bono basura.